Mañana es el gran día, mañana es el día que cualquier Trinitario espera con inquietud, mañana las calles del barrio de la Trinidad serán, por una vez al año, calles inundadas exclusivamente por el malva de su Madre, la Reina de la Trinidad.
Aunque mañana veremos a la Señora vestida de blanco, algo que algunos estábamos esperando años atrás, mañana es un día para sentir y pensar en malva. Mañana “su” banda, la Trinidad Sinfónica, hará su desfile más feliz y mañana, sus hombres de la Mesa, por una vez, le verán el rostro a su Virgen cada vez que bajen el Trono.
Mañana es el gran día, ese día que venía señalado a la derecha de este blog desde hace 38 días, y que segundo a segundo ha ido pasando, visita tras visita y artículo tras artículo hasta llegar a mañana.
Mañana es el gran día, mañana es nuestro día, el día de los Trinitarios, que ganas tengo que sea mañana.
¡ Trinidad, a tus pies ¡ (Gracias Aurelio)
De Victor Carnero, un Hombredetrono de la Mesa de la Trinidad
1 comentario:
Como ya habeis tenido la oportunidad de ver y leer gracias a nuestro hermano Flores,hace dos martes un grupo de trinitarios nos reunimos para jugar a fútbol sala en el pabellón del barrio. Pues bien, desde esa noche vengo arrastrando una rotura de ligamento del pie ¡no saben como pararme!. No soy devoto de contar si me duele aquí o allí, pero para la ocasión he debido contarlo.
Anteayer comencé a apoyar el pie, vaya que mañana al Aragonés le de por convocarme y al menos tengo que hacer el paripé, pero aún noto pinchazos al andar y esto me ha dado que pensar: ¿estaré una semana más sin hacer deporte? ¿podré sacar el sábado a la Virgen de la Trinidad?
Esto lo pensaba mientras a la tarde me dirigía a la tienda de cuadros de mi barrio a enmarcar dos láminas para regalo. Una vez llegué, tuve que esperar porque estaban atendiendo, por lo que me puse a mirar los cuadros que allí colgaban, hasta que me empezó a doler el cuello y bajé la cabeza. ¿Y qué vi? pues vi una foto apoyada en un mueble, era pequeña y estaba sin enmarcar, y en ella aparecía una imagen antigua de la Virgen de la Trinidad avanzando por la plaza de la iglesia de San Pablo en un trono pequeño llevado por hombres de tronos enchaquetados. Me asombré.
Esto también me dió que pensar: ¿es una foto del día de la Trinidad? ¿qué hace esta foto en el Puerto de la torre? ¿por qué me la he encontrado justamente hoy? y ¿por qué no está enmarcada? Y fruto de la imaginación, de la magia, concluí que el sábado debía estar para procesionarla porque he de formar parte de ese marco que Ella solicita y que se compone de los trinitarios que comenta Víctor, y ahí me incluyo yo.
Mañana a primera hora tengo que ir a recoger los cuadros, si veo la foto preguntaré por ella: si es de alguien y si está ahí para que la enmarquen, sino es así pediré que me la den, mañana os la enseño y ya nos encargamos nosotros de ponerle el marco.
Hasta mañana Trinitarios.
JAVI
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