Se nos fue... "el del cuchillo"

Lejia, ya no tendrás más a esa pareja inseparable de varal que había que quitar con agua caliente, pues como él decía... "ese puesto es mio". Lejia..., no podrás.
Señores, ya no se podrán escuchar esos chistes de los cuales aún resuenan carcajadas entre las maderas de la mesa de la trinidad. Señores..., no podremos.
Tampoco podremos escuchar esos sabios consejos de un experimentado HOMBREDETRONO... de un AMIGO, de un COMPAÑERO, de un HERMANO..., no serán posible.
Así era RAI, una persona de apariencia seria pero extrovertida, una persona que se dejaba querer.
Este año no pudiste disfrutar como a ti te gusta de tú SEMANA SANTA, que no es otra forma que debajo de un varal, y no en cualquier sitio, sino en uno de esos donde solo los elegidos pueden disfrutar.
A ti MADRE te ha reservado un palco para que no faltes a nuestra cita, la de todo LUNES SANTO, un palco muy especial, un palco cerrado por cuatro paredes de madera donde no se llega ha apreciar de forma nítida lo que hay en el exterior, donde no falte ese olor a incienso y esas marchas que habías escuchado una y otra vez y no te cansabas de oírlas, donde como siempre hemos dicho, se vive, se siente y se respira de otra manera... todo ello RAIMUNDO, para que te sientas como en casa.
Siempre recordaremos los buenos momentos que nos haces pasar.
Hasta siempre RAI.

TRINIDAD!!! a tus pies.